Los inversores pueden ser de distintos tipos según el tipo de onda que generen: inversores de onda cuadrada, inversores de onda modificada o inversores de onda senoidal pura.
Según el electrodoméstico que vayamos a utilizar podremos escoger entre uno u otro, pero el que nos va a dar una corriente alterna de las mismas características que la obtenida por la red eléctrica es el inversor de onda senoidal pura.
El precio de los transformadores de 24V de onda senoidal pura puede variar entre 115 y 2300 euros, según el voltaje máximo con el que se quiera trabajar. El voltaje máximo (o potencia máxima) viene siempre indicado en W, si por ejemplo tenemos un inversor de 1200W podríamos conectar electrodomésticos hasta llegar a 1200W de consumo instantáneo, una vez alcanzado este número no podemos conectar más aparatos, ya que el inversor se saturará y dejará de funcionar.
A la hora de comprar un inversor debemos fijarnos en el código que les acompaña, por ejemplo: 24V / 220V / 1600W.
La primera cifra, 24V corresponde al voltaje de la electricidad que debe entrar en el inversor, en este caso, proveniente de una batería de 24V, no pueden conectarse pues a baterías de 12V; 220V es el voltaje de la corriente alterna que vamos a producir con el transformador y que tendrá una frecuencia de 50Hz (como la suministrada por la red eléctrica); y como ya hemos comentado, 1600W es la potencia máxima que puede conectarse simultáneamente al inversor sin llegar a saturarlo.
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