Las baterías secas AGM y GEL son tipos de baterías de plomo-ácido selladas que se utilizan comúnmente en aplicaciones de energía renovable y sistemas de respaldo de energía.
Las baterías AGM (Absorben Glass Mat) utilizan un tecnología mediante la cual se consiguen separar las fibras de vidrio absorbente para mantener el electrolitro en su lugar. Esto reduce la posibilidad de derrames y consigue que la batería sea más resistente a golpes y vibraciones. Las baterías AGM tienen una alta capacidad de corriente y una baja tasa de autodescarga.
Las baterías de GEL utilizan un tecnología de gelificación, esto hace que el electrolitro se mantenga en su lugar. El gel es una solución de ácido sulfúrico y sílice, siendo su combinación una sustancia espesa y gelatinosa durante la carga.
Ambos tipos de baterías son de plomo-ácidos selladas y requieren un poco de manteniento en comparación con las baterías de ploomo-ácido abiertas. También tienen una vida útil más larga y son más seguras en interiores.