La energía renovable ayudará a crear un planeta mejor y es una de las soluciones a la crisis climática. Actualmente, los coches eléctricos ya están en el mercado pero ¿existen otras tecnologías que ayudarán a cuidar el medioambiente?
Una empresa americana está desarrollando un proyecto para convertir las ventanas de edificios acristalados en células fotovoltaicas que conviertan la radiación solar en electricidad y así aprovechar mejor la luz del sol.
Esta idea se trata de células solares transparentes que se ubicarían a modo de cristal en forma de ventana, creando así una especie de “vidrio solar”. La compañía, nacida en el Instituto Tecnológico de Massachusetts en 2012, espera poder hacer uso de esta tecnología en instalaciones de vidrio de uso cotidiano; desde ventanas en edificios muy altos, lunas de los vehículos o el cristal de la pantalla de los teléfonos móviles.
Es cierto que existen varias empresas desarrollando tecnologías similares pero los proyectos se encuentran aun en fase temprana.
¿Cómo funcionan estas células fotovoltaicas?
La superficie del vidrio está cubierta por un tinte orgánico que permite pasar la luz solar visible (tal y como lo haría un ventana normal), sin embargo, es capaz de capturar los rayos infrarrojos que desprende la luz solar para convertirlo en electricidad.
La realidad es que esta tecnología tiene una eficiencia bastante baja , pero si las células cubrieran un área bastante grande de la instalación resultaría la mejor solución para cubrir más demanda energética. Por este motivo, los responsables del proyecto han destacado que la idea es que estas células sean un complementos de los paneles solares convencionales que se pueden ubicar en los tejados de los edificios. La combinación de los dos métodos supondría un ahorro considerable teniendo en cuenta que podrían llegar a consumir lo mismo que se produciría.
Otra de las tecnologías que está surgiendo es un proyecto de persianas solares. Estas persianas ayudan a ahorrar costes y ahorrar en la factura. Pueden llegar a generar 100W por cada metro cuadrado, lo que cargaría un teléfono inteligente, un portátil o una televisión.
¿Crees que estas innovaciones llegaran a asentarse en el mercado? ¿Serán los paneles solares el complemente perfecto?